La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) se 'lavó" ayer
las manos del caso de desalojo de la delegación de empresarios
cubanos del Hotel María Isabel Sheraton.
"Es un asunto entre particulares, por lo que la Cancillería no va a
intervenir",
expresó escuetamente la dependencia, por medio de la Dirección
General de Comunicación Social.
Incluso, la Secretaría de Relaciones Exteriores sostuvo que
en México no se aplica la Ley Helms-Burton.
El vicepresidente de la Mesa Directiva de la Cámara de
Senadores, Raymundo Cárdenas, expresó que la Cancillería cede soberanía
nacional al no intervenir en el desalojo
de la delegación cubana.
"Están actuando como han actuado todo el sexenio, cuidando
de no incomodar al Gobierno norteamericano", dijo.
-¿Con eso están tolerando la aplicación de una ley
norteamericana?-, se le preguntó.
"Así es, disminuyendo la soberanía nacional", expresó.
Agregó que el Estado mexicano debería de hablar con los
dueños del hotel para decirles que violaron leyes
mexicanas.
Para Cárdenas, el desalojo de los cubanos demuestra además
que opera en México la inteligencia estadunidense.
"Es muy grave, porque esta empresa no respetó las leyes
mexicanas que estableces que cualquier ciudadano que esté en
este territorio, tiene los mismos derechos.
"En México no hay ninguna ley en la cual se pueda amparar
el Sheraton para hacer lo que hicieron. Da cuenta del grado
tan intenso que tiene ahorita la actitud imperial del Gobierno
del Presidente Bush", dijo.