RESUMEN DEL TEMA:
EL MARCO ATRIBUTIVO DE LA COMISIÖN PERMANENTE,
EN VISTAS DEL NUEVO ROL DEL PODER LEGISLATIVO
Conforme a los matices de las reformas de los Congresos y de nuestras instituciones parlamentarias, nos hemos abocado a reflexionar sobre la Comisión Permanente y el rol de este órgano en el Poder Legislativo. Al intercambiar puntos de vista y planteamientos en torno a este tema resultó de ese análisis y estudio la conveniencia de proponer cambios sobre el contenido del actual artículo 78 de la Constitución.
Se incorporan adiciones y reformas a las fracciones de dicho precepto constitucional, para proponer una nueva integración, que incluye un miembro diputado del Distrito Federal y los respectivos de cada Entidad Federativa, es decir, 16 diputados y 15 senadores para que debatan en la Comisión Permanente no sólo en relación con los nombramientos de funcionarios o cancilleres, sino en este caso de los altos funcionarios que se encuentren involucrados en la materia de seguridad pública, bajo un principio de corresponsabilidad. También se adiciona la facultad de este órgano para designar al Procurador General de la República en razón de la importancia de este puesto y su independencia del Poder Ejecutivo.
De igual forma se adiciona la función de la Comisión de ratificar los nombramientos de los Secretarios de Estado que tengan que ver con asuntos de competencia federal, como lo es la educación, la salud, los aspectos sociales y los ecológicos.
Se consideró además una propuesta que tiene la finalidad de otorgar a este órgano la facultad de vigilar el trabajo de Comisiones para que este mismo órgano en los recesos se encargue de dar seguimiento y supervisión al trabajo legislativo o de comisiones a efecto de desahogar lo máximo de asuntos pendientes del proceso parlamentario con la ayuda y colaboración con la Conferencia para la Dirección y Programación de los Trabajos Legislativos, para el caso de la Cámara de Diputados.
Se incorporó una nueva función por demás importante cuyas particularidades requieren de un cuerpo técnico altamente especializado como lo es el análisis del Informe Trimestral que rinde el Ejecutivo a la Cámara de Diputados y del trámite o curso que se le da al mismo, así se propone igualmente que en el seno de la Comisión Permanente sea analizado cuantitativa y cualitativamente por los miembros de la Comisión al efecto de que ésta emita un Reporte de Opinión y de esta forma participe el Senado en los aspectos financieros y presupuestales.
Por último y por considerar que va a ser necesario aprovechar la experiencia de diversos legisladores en uno o varios periodos, se incluye que la Comisión Permanente otorgue su beneplácito en el caso de la reelección de los legisladores.
Así, las propuestas van acompañadas de una serie de análisis y justificaciones expresadas a lo largo de la tesina que servirán como base para realizar el proyecto definitivo de la reforma al artículo 78 constitucional, como ajustes a nuestro sistema de pesos y contrapesos.
Con esta propuesta, queremos manifestar nuestra voluntad para que el proceso de reforma y transformación de las instituciones democráticas sea acorde al avance de la evolución histórica y contemporánea, en este caso, de la Comisión Permanente y que ésta se norme por un ordenamiento consecuente con los tiempos de nuestra democracia participativa y plural.
Desde luego se incluye en la tesina la propuesta de reformas del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General, que después de la reforma de abril de 1999 este ordenamiento quedó sin materia, dado el nuevo contenido de los artículos de la Ley Orgánica.
Recordando que, desde el punto de vista constitucional, el Congreso tiene facultades propias para poder expedir sus propias normas legislativas, acordes a su competencia, y no tiene ninguna limitación constitucional para emitir la normatividad interna que sustente la reforma constitucional planteada.
De los diversos apuntes y notas del Seminario, se pretende elaborar la presente justificación de reformas al artículo 78 constitucional, así como establecer la viabilidad más que jurídica, política de las propuestas, en ese tenor cabe destacar lo siguiente:
Una Asamblea más representativa y la nueva composición de las Cámaras Legislativas
a nivel Local y Federal, requieren de una mayor representación, más equitativa y proporcional a las fuerzas políticas de los diversos partidos en el gobierno.
Cada vez es mayor el número de Estados en donde gobierna la oposición, en un sistema aunque federal, pero centralista en muchas decisiones, se retrasan y obstaculizan algunos cambios o decisiones de carácter político y administrativo, muchas de ellas por bien del país.
La representación de cada Estado y del Distrito Federal, en la Comisión Permanente representa una imagen más sólida y acorde a los intereses de la Nación y a la Reforma Política ya planteada para el caso de la Capital de la República.
Frente a la Federación y en torno a los asuntos que esta debe resolver, principalmente los relacionados con la seguridad pública, distribución y fiscalización de recursos, los Ramos descentralizados del Presupuesto, así como decisiones en materia de salud, educación, aspectos sociales y en general de las actividades aún a cargo del Ejecutivo Federal, a lo largo del país, se requiere de una visión mayormente federalista y democrática.
La selección plurinominal y directa de nuestros representantes en ambas Cámaras, Diputados y Senadores, garantizan que los hombres más aptos y preparados lleguen al seno de la Comisión Permanente, y que éstos realmente representen a sus Estados y al Distrito Federal, y que sus intereses políticos y los de sus comunidades sean los que decidan y acuerden los asuntos asumidos en su nueva competencia, que se relaciona con la designación del Procurador General de la República y la ratificación de los Secretarios de Estado de competencia federal.
La ratificación del Contador Mayor de Hacienda de la Cámara de Diputados y Secretarios de Estado que se relacionen con los aspectos de educación, salud, aspectos asistenciales de carácter social y ecológicos, así como de los mandos superiores de los Estados y Distrito Federal en materia de Seguridad Pública, denotan una mayor corresponsabilidad entre ambos Poderes Públicos, el Ejecutivo y el Legislativo, en dichos cometidos de carácter esencial y sociales, previstos en nuestra legislación, así como de la vigilancia y supervisión de la aplicación de los recursos federales por virtud de los Ramos del Presupuesto, y en las materias de índole federal que abarcan toda la extensión del país, como ya se dijo de los aspectos de salud y educación, de programas sociales, y desde luego, los asignados en materia de seguridad pública.
Como vemos no se trata de dividir opiniones sino de ser realistas a nuestra actual forma de organización social y política; ya sin un partido hegemónico, el sistema de pesos y contrapesos sería la esencia del nuevo rol del Poder Legislativo. Reformar el poder significa fortalecer y respetar las atribuciones del Congreso Federal.9
Quién mejor que los representantes de toda la Nación en la Comisión Permanente para ratificar la reelección de los legisladores de ambas Cámaras.
Los representantes serían elegidos no de las Legislaturas Locales sino de los legisladores federales y locales electos en forma directa o proporcional, lo que da mayor garantía del aspecto democrático de esta propuesta.
El trabajo legislativo, supervisado y vigilado por los miembros de la Comisión Permanente, denota una tarea fundamental de este cuerpo legislativo, donde se encuentran representados todos los intereses de la Nación, independientemente del desahogo de la agenda política que lleve a la discusión los problemas nacionales.
Las nuevas tareas de revisión de los Informes Trimestrales que rinde el Ejecutivo le traerían el conocimiento cuantitativo y cualitativo de las finanzas del país y de sus aspectos programático-presupuestales, así como de la gestión del Ejecutivo Federal. El Senado de la República intervendría en el análisis y evaluación de los aspectos financieros y programáticos-presupuestales del Gobierno Federal, a través del trabajo de la Comisión Permanente.
Con esta propuesta consideramos se cumple con un principio esencial en la convivencia y de desarrollo de nuestras instituciones políticas. La Comisión Permanente así planteada será más democrática y representativa del Interés Nacional, sus funciones de permanencia, no sólo en lo político, sino en el análisis y discusión de los problemas centrales del país, que constituyen la verdadera agenda política de un estado moderno y ejercen una función de equilibrio de los poderes públicos, estarían a cargo de la Comisión Permanente.
Los obstáculos y recelos a los cambios, serían lo únicos que impidieran que esta u otra propuesta del texto constitucional pudieran modificar la estructura y atribuciones de la Comisión Permanente y hacer más eficiente el rol del Poder Legislativo en los años por venir. La constante colaboración y coordinación entre los poderes, 10 aún en los recesos son de suma importancia en nuestros días a la luz de la nueva configuración de las Cámaras Legislativas.