e analizara la
proposición de legislar no solo de forma constitucional sino de forma conjunta y
democrática con una participación de la sociedad en general, sin distinción de clases
sociales.
ANTECEDENTES O REFERENCIAS HISTORICAS
La palabra derecho en un sentido
etimológico, significa lo recto, lo rígido, lo adecuado. Es intermino que utilizamos con
frecuencia en nuestra vida cotidiana para referirnos a lo que se hace en un sentido recto,
de acuerdo con lo establecido, correctamente. En nuestro uso común del lenguaje decimos,
"no hay derecho" a tal cosa u otra, considerando con ellas que la consideramos
injusta. Intuitivamente sabemos que existe un sentido social compartido de lo correcto y
lo injusto, aunque no siempre podamos describirlo y mucho menos justificarlo. Dadas las
dimensiones y las formas de organización de las sociedades actuales parece muy difícil,
sino imposibles que algún tipo de participación directa puede sustituir al principio de
representación como mecanismo de actualización de la voluntad de los
ciudadanos.
DESARROLLO DEL TEMA
En efecto, precisar el sentido de
derecho que nos importa es necesario vincularlo a la noción de ley aunque esta última
también requiera, por lo menos una breve clarificación de los conceptos de
constitución. Por supuesto, un Estado de derecho no se da por generación espontanea ni
depende solo de la voluntad o decisión de algún actos político en particular. Su
construcción, es un proceso que involucra a todos los actores políticos
relevantes y a la ciudadanía, y no se agota en la edificación de un sistema
jurídico o constitucional. El Estado de Derecho prevalece el gobierno de las leyes sobre
el arbitrio de los hombres, al tiempo que se reconocen y garantizan las libertades de los
ciudadanos.
CONCLUSION PROPUESTA O SOLUCION
Un problema central de que no haya
participación de la ciudadanía tiende a que las iniciativas de leyes propuestas por
quienes tienen ese derecho constitucional, podrían ser planteados en un binomio del
sistema representativo, por tal situación se corre el riesgo de que dicha ley, en lugar
de resolver algún problema social de comportamiento particular o en masa, llegue a
afectar de una manera directa a la misma ciudadanía en lugar de proporcionar el verdadero
sentido de convivencia social tanto del Estado para los gobernados, como de los gobernados
hacia los gobernantes; por otra parte que hubiera mayor efectividad si el pueblo tiene
acceso a las iniciativas de leyes, es decir, que tendrían un mayor acuerdo porque desde
el momento que nosotros tenemos el acceso de intervenir y externar si es posible necesario
no hacer alguna ley o incluso realizar reformas de las mismas.
APLICACIÓN