- La problemática no
natural del agua.
- El uso inadecuado72
Las prácticas actuales han conducido a
eficiencias muy bajas en el uso del agua que se extrae de cauces y acuíferos
para consumo al año. La ineficiencia en su uso, se asocia directamente
a la baja valoración del recurso, el mayor derroche se genera en el
uso agrícola, donde prevalece la exención en el pago de derechos de
aprovechamiento.
La eficiencia de riego parcelario es únicamente
el 70% (Semarnap, 1996). De manera similar, la eficiencia en el uso
doméstico es de alrededor del 60%. Con muchos incentivos para hacer
cambios substanciales en sus procesos o en la utilización de bienes
ahorradores de agua, el uso del agua en la industria es también poco
eficiente.73
- Uso en los centros de población.
En los próximos años se prevé un incremento
en la demanda de agua para uso y consumo humano. En el medio rural
los rezagos existentes hacen que 13 millones de habitantes carezcan
del servicio, la cobertura en las localidades urbanas es 94%, (4
millones no cuentan con el servicio).
Con 2,700 km. de acueductos se entregan
a la población 270 m3/s de agua. La conservación y el
mantenimiento de la infraestructura de abastecimiento de agua y
su distribución han sido inadecuados, por lo que su rehabilitación
requiere de grandes inversiones.74
El 95% del volumen del total del agua
que se suministra es desinfectada, en muchos casos se requiere de
tratamiento adicional para adecuar su calidad fisico-química, situación
que no se verifica en la práctica -algunas veces- ni siquiera en
las ciudades importantes.75
- Los organismos operadores de sistemas
de agua y saneamiento presentan serias deficiencias, en los ámbitos
técnico, operativo y financiero, debido a los altos requerimientos
de inversión, generalmente superiores a los recursos disponibles.
Actualmente menos del 40% de los costos operativos y de mantenimiento
son cubiertos mediante el cobro de tarifas. Otras deficiencias son:
disminución de fondos fiscales, alta rotación de los cuadros directivos,
técnicos y administrativos; marco jurídico inadecuado, politización
de las decisiones del subsector, baja eficiencia operativa, deficientes
niveles de servicio, altos índices de endeudamiento, poca disposición
al pago, baja eficiencia de facturación y cobranza, así como tarifas
inadecuadas.
- Uso agrícola.
A nivel nacional 22 millones de hectáreas
en que se practica la agricultura, 30%, de más de 6.1 millones, cuentan
con riego y generan el 57% del valor de la producción agrícola total,
esta productividad es 3.2 veces la de cultivos de temporal.76
3.4 millones de hectáreas corresponden
a los 81 distritos de riego y 2.9 millones a las cerca de 39 mil unidades
de riego para el desarrollo rural.
Sin embargo, tanto los distritos de riego
como las pequeñas unidades de riego presentan problemas de deterioro
físico y pérdida de productividad, misma que se refleja en un menor
dinamismo de la producción. Esto significa que por medio del riego se
aprovecha menos de la mitad de los volúmenes extraídos (Semarnap, 1996).77
Por causas de la salinidad, en los distritos
de riego del país, 450 mil hectáreas no se riegan. Afortunadamente,
esta superficie tiende a decrecer, debido a las acciones ya en proceso.
Debido a la baja disponibilidad de agua
en las presas y variaciones constantes en la demanda de productos agrícolas,
en los últimos años la superficie cosechada ha oscilado entre 80 y 90%.
México ocupa el sexto lugar a nivel mundial
en superficie para riego, la agricultura no ha alcanzado el desarrollo,
las inversiones para infraestructura son generalmente mayores a los
recursos disponibles -o éstos no se otorgan con la oportunidad suficiente-
por lo que las obras tienen excesivos periodos de ejecución o se encuentran
inconclusas, generando inversiones improductivas.
Existe una baja eficiencia en el consumo
de agua, incentivada por la exención de pago de derechos y operativamente,
por inadecuados métodos de riego. Adicionalmente, a la carencia de revestimiento
de los canales y a la falta de mantenimiento de la infraestructura,
se suman altos costos de extracción por los sistemas de bombeo ineficiente
y la salinidad de suelos ocasionado por prácticas agrícolas inadecuadas.
c) Uso industrial.
Del agua que se extrae anualmente 75% proviene
de acuíferos y el 25% restante de fuentes superficiales, estas últimas
presentan altos índices de contaminación, dificultando su aprovechamiento
para ciertos procesos.
He aquí un circulo vicioso: el volumen
de descargas proveniente de las industrias equivale al producido por
una población de 70 millones de habitantes, sólo el 8% de este caudal
recibe tratamiento previo y las industrias con mayor consumo de agua
y generación de contaminantes se han establecidos en regiones con baja
disponibilidad y donde los escurrimientos poseen poca capacidad de asimilación
y dilución. Además, existe una excesiva concentración sectorial y regional
de la demanda, y la tecnología utilizada en la mayoría de los procesos
industriales es poco eficiente en relación con el uso del recurso. 78
- Calidad del agua: Contaminación.
La mayor parte de la contaminación
se origina en los usos urbano, industrial y agrícola, sin menospreciar
el impacto de la contaminación natural del agua, que afecta principalmente
a las aguas subterráneas próximas a las costas por intrusión salina.
Existen dos tipos de contaminación,
la puntual y la difusa o dispersa. La primera puede ser controlada
mediante acciones específicas; la segunda, se produce en general
a lo largo de extensas superficies hacia los acuíferos o por las
márgenes de los ríos y laderas de los embalses. Al no haber un punto
de concentración es muy difícil su identificación y control.
Se estima que existen en el país del
orden de 35 mil descargas de aguas residuales que se vierten a cuerpos
receptores de propiedad nacional. El control de las descargas se
realiza con la regularización mediante la expedición específica
de calidad que deben reunir, descritas en la NOM-001-ECOL-96.79
Las descargas que incumplen la norma provocan la contaminación.
La humanidad ha atentado contra el
medio ambiente en sus procesos productivos un explosivo deterioro
de los recursos naturales y del agua en particular se ha rebasado
su capacidad de dilución y autorecuperación. Es un precio que afecta
las posibilidades de vida y de trabajo de las generaciones futuras.
80
- Contaminación de cuencas.81
- Contaminación por subregiones.
Las subregiones con mayor grado
de contaminación, en general, son: Lerma, Alto Balsas y
Alto Pánuco.
Mapa 2. Contaminación de
Cuencas.

Fuente: Comisión Nacional del
Agua. "Estrategias del Manejo de Agua en México".
Conferencia Magistral presentada en el 1º Foro Regional
de Consulta sobre Legislación en materia de agua. Organizado
por la Comisión de Asuntos Hidráulicos de la H. Cámara de
Diputados, LVII Legislatura. Mazatlán, Sinaloa, Mayo de
1999.
- Contaminación de Cuencas
por tipo de agua.82
- Aguas superficiales.
Estudios realizados por la Comisión
Nacional del Agua en 228 cuencas que cubren el 80% del territorio,
donde se asienta el 95% de la población y se ubica el 75% de la
producción industrial, así como el 98% de la superficie bajo riego,
permiten establecer una primera clasificación de las cuencas del
país, en la función del grado de alteración de su calidad natural.83
En 15 cuencas se genera el 61% de
la carga orgánica total medida en términos de la Demanda Bioquímica
de Oxígeno (DBO).
Son: Moctezuma (14.8%), Papaloapan
(12.3%), Jamapa (5.4%), Bravo- San Juan (4.3%), Soto La Marina
(3.9%), Atoyac (3.0%), Lerma-Salamanca (2.7%), Santiago-Guadalajara
(2.7%), Grande Amacuzac (2.0%), Tamuín (2.0%), Pánuco (1.9%),
Lerma-Toluca (1.9%), Yaqui (1.8%), Santiago-Aguamilpa (1.6%) y
la Laja (1.6%).
Pueden agregarse las cuencas de los
ríos Blanco, Culiacán y Coatzacoalcos, por la magnitud y características
de la contaminación ambiental, así como las cuencas de los ríos
que descargan en el Mar de Cortés, por agroquímicos que reciben
de retornos agrícolas.
Los procesos de deforestación, las
prácticas agrícolas inadecuadas y los procesos de urbanización
contribuyen a la degradación y deterioro de los suelos, que a
su vez impactan en la calidad del agua.
Un indicador que refleja la alteración
de la calidad del agua es la infestación de los cuerpos de agua
con malezas acuáticas. Existen cerca de 46 mil hectáreas infectadas
en 114 presas y lagos del país, 12 mil kilómetros de canales y
19 mil de drenes de los distritos de riego.
- Agua subterráneas.
Las áreas con mayores alteraciones en la
calidad de las aguas subterráneas, son la Comarca Lagunera, el Valle
de México y otros acuíferos en zonas urbanas (Región del Bajío y Valle
del Mezquital). Las principales fuentes de contaminación son: Lixiviados
de desechos sólidos, descargas de agua residual no incorporadas al drenaje
municipal y disolución de minerales y formaciones rocosas. También se
presenta un problema general de contaminación difusa, en los acuíferos
que subyacen las zonas agrícolas, para los cuales deberá realizarse
un programa sistemático de monitoreo.
La sobreexplotación de acuíferos en las
zonas litorales propicia como ya se mencionó la contaminación
por intrusión salina, ésta se presenta principalmente en la península
de Baja California, la costa de Sonora y la península de Yucatán. Para
la atención de estos problemas, se han establecido vedas de extracción
de aguas subterráneas.
- Contaminación en ríos y lagunas.
En información actual publicada en enero
del presente se dice que de acuerdo con estudios elaborados por la Comisión
Nacional del Agua (CNA) y la Secretaría del Medio Ambiente Recursos
Naturales y Pesca (SEMARNAP), de las 158 cuencas hidrológicas principales
que hay en el país (ríos), 43 reciben una carga orgánica producto del
nulo o escaso tratamiento del agua utilizada en servicios urbanos e
industria, y una quinta parte de los principales mantos subterráneos
de agua en el país registran sobreexplotación y, en consecuencia, un
sensible deterioro de su calidad.
El diagnóstico de la CNA señala que son
once las cuencas hidrológicas que mostraron los mayores índices de contaminación:
Pánuco, Lerma, Balsas, Blanco, Guayalejo, San Juan, Culiacán, Fuerte
Cohuayana, Nazas y Conchos; reciben el 59 por ciento del total de descargas
contaminantes.
En lagunas y lagos:
Chapala en Jalisco, y Páztcuaro en Michoacán, están entre los más afectados;
Catemaco y Mandinga en Veracruz; Bacalar y Nichupté en Quintana Roo;
Coyuca en Guerrero; y Lerma y Zempoala en el Estado de México.
20 kilómetros cúbicos, equivalentes
al volumen total que almacena la presa más grande del país (La Angostura,
en Chiapas), constituyen las aguas residuales que anualmente regresan
a las corrientes con mayor o menor carga contaminante.
El sector agrícola genera 43 por ciento
de las aguas residuales que regresan a los ríos y acuíferos subterráneos
con residuos agroquímicos como plaguicidas, pesticidas y fertilizantes.
La industria genera 31 por ciento con contenidos
de metales pesados, ácidos, grasas y aceites. En este caso de
acuerdo con la Semarnap 65 por ciento lo generan menos de 200
grandes empresas, 20 por ciento 7 mil 200 empresas de tamaño mediano
y pequeño y 15 por ciento 192 mil 600 microempresas.
Y las descargas municipales de agua residual
constituyen 12 por ciento del volumen total de agua contaminada que
regresa a ríos y acuíferos, siendo las aportantes mayores las zonas
metropolitanas de la Ciudad México, Monterrey, Guadalajara, Puebla,
León, Ciudad Juárez y la Región Lagunera.84
72Ramos
Valdés, Cesar O. "Problemática del Agua en México",
Op. Cit,.
73Aldama
Rodríguez, Alvaro y Gómez Ugarte, Luís. Fortalecimiento de la Capacidad
Institucional del Sector Agua en México
Op. Cit,. pag. 4-13
74Aldama
Rodríguez, Alvaro y Gómez Ugarte, Luís. Fortalecimiento de la Capacidad
Institucional del Sector Agua en México,
Op. Cit,.
75Según datos
del censo de 1990, 26% de la población de México se concentra en Ciudad
de México, Guadalajara, Monterrey y Puebla. 33% en 91 ciudades medias
que oscilan entre 100 mil y un millón de habitantes. El 41% restante
se asienta en 222 ciudades entre 20 mil y 100 mil habitantes de 2,270
ciudades pequeñas de 2,500 a 20,000 habitantes y más de 150 mil pequeñas
ciudades y comunidades rurales (Sedesol -INE, 1994). A la fecha, se
cuenta con infraestructura para desinfectar el 95% del agua que se suministra
a la población y un volumen aproximado de 2.2 km3 de agua
al año (70 m3) es sometido a un proceso de potabilización
adecuado (SEMARNAP, 1996). Aldama Rodríguez, Alvaro y Gómez Ugarte,
Luís. Fortalecimiento de la Capacidad Institucional del Sector Agua
en México
Op. Cit,.
76En
1996 según datos de SEMARNAP, existían cerca de 20 millones de hectáreas
abiertas al cultivo en México; alrededor de 13.8 millones se dedican
a la agricultura de temporal y poco más de 6.2 millones cuentan con
infraestructura de riego. El volumen estimado de descarga de aguas de
retorno de la agricultura, contaminadas con pesticidas y herbicidas,
era de 12 km3/año (Semarnap, 1996). Aldama Rodríguez, Alvaro
y Gómez Ugarte, Luís. Fortalecimiento de la Capacidad Institucional
del Sector Agua en México
Op. Cit.
77Aldama
Rodríguez, Alvaro y Gómez Ugarte, Luís. Fortalecimiento de la Capacidad
Institucional del Sector Agua en México
Op. Cit.
78Aldama
Rodríguez, Alvaro y Gómez Ugarte, Luís. Fortalecimiento de la Capacidad
Institucional del Sector Agua en México
Op. Cit.
79Jaime
P., Alberto. "Una visión del Agua en México". Conferencia
Magistral
Op. Cit.
80Ramos
Valdés, Cesar O. "Problemática del Agua en México", Conferencia
Magistral
Op. Cit.
81Comisión
Nacional del Agua. "Estrategias del Manejo de Agua en México".
Conferencia Magistral
Op. Cit.
82Jaime P., Alberto.
"Una visión del Agua en México". Conferencia Magistral
Op. Cit.
83En
1993, la CNA decía que conforme a estudios realizados en 218 cuencas
que cubren el 77% del territorio, donde se asienta el 93% de la población
y se ubica el 72% de la producción industrial y el 98% de la superficie
bajo riego, permiten establecer una primera clasificación de las cuencas
del país, en función del grado de alteración de su calidad natural.
De acuerdo con estos estudios, en 20 cuencas se genera el 89% de la
carga contaminante total, medida como DBO. Solo en cuatro cuencas: Pánuco,
Lerma, San Juan y Balsas, se recibe el 50% de las descargas de agua
residual, incluyendo las descargas de las principales ciudades (CNA-1993).
84Rodríguez
Cortés, Raúl. Uno de Cada Tres Ríos, con Restos Orgánicos. El
Heraldo de México. 7 de enero de 2000, pag. 1/10-A
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